Cómo cuidar tus pechos

Las mujeres rara vez se dan cuenta de que el sujetador no es sólo una lencería erótica, sino sobre todo una prenda que garantiza la salud y la comodidad.

Junto con la Sra. Małgorzata Kazimierczyk, especialista en ropa interior y propietaria del salón «el Mundo de la Ropa Interior MARGOT» de Opole, decidí cambiarlo. Especialmente para ustedes, queridas lectoras, estamos descubriendo los secretos de la selección adecuada del sujetador y del cuidado de los senos.

– Sra. Małgorzata, los periódicos y las páginas de Internet informan de que una gran parte de las mujeres no saben elegir bien un sujetador. ¿Es esto cierto? ¿Cuáles son sus observaciones?

Małgorzata Kazimierczyk – Sí, es cierto. Antes, hasta el 90% de mis clientas solían llevar sujetadores mal ajustados. Ahora esta cifra se ha reducido a alrededor del 70%. Intento educar a las mujeres, además, ellas mismas también llegan a diversas informaciones importantes, por ejemplo, en Internet. También observo que las madres son cada vez más conscientes a la hora de elegir la ropa interior. Transmiten esta conciencia a sus hijas, al tiempo que ejercen un mayor control sobre la ropa interior que llevan. Esto hace que la situación mejore cada año.

– ¿Qué errores cometen las mujeres al elegir un sujetador?

M.K. – Este es una cuestión muy individual. Las mujeres con pechos pequeños usan sujetadores con un gran push-up, es decir, los que tienen el mayor perfil posible visible bajo la blusa. Por desgracia, las mujeres dejan de prestar atención a la circunferencia. Por otro lado, las mujeres con pechos grandes cometen el error de meterlos en sujetadores pequeños. A menudo no conocen la amplia gama de tamaños. Así que compran el sujetador más grande disponible, que suele ser demasiado pequeño. También suelen elegir la circunferencia más grande para conseguir el cuenco más grande posible. El resultado: pechos saliendo por abajo, por los lados, por arriba, literalmente por todos lados.

– ¿Cómo podemos determinar nuestra propia talla de sujetador?

M.K. – Una mujer puede medir su propia circunferencia. Sin embargo, sin al menos una visita a un especialista no puede saber la talla correcta de su busto. Para no equivocarse y valorar correctamente la talla de sujetador es necesario tener en cuenta todos los parámetros del busto y saber exactamente a partir de qué momento empieza el pecho. Siempre se debe recoger el inicio del pecho desde la axila hasta el interior de la copa.

– ¿Cuáles son las consecuencias para la salud de llevar un sujetador inadecuado?

M.K. – Las consecuencias más comunes de llevar un sujetador incorrecto son los dolores de cabeza y de espalda. El peso de los senos actúa sobre la columna vertebral, por lo que un sujetador mal ajustado puede provocar una degeneración. Otros problemas son los distintos tipos de inflamación, hinchazón y pérdida de firmeza del busto. Por supuesto, se trata de procesos a largo plazo.

– Un sujetador bien ajustado garantiza tu bienestar y tu salud. Existen probablemente muchos beneficios…

M.K. – Sí. En primer lugar, unos pechos bonitos, de aspecto saludable y firmes. Mejor circulación de la sangre, lo que se traduce en unos pechos con una circulación adecuada. No hay presión sobre los pechos, lo que reduce el riesgo de cáncer.

– Ahora hablemos de los pechos de las madres lactantes. Durante el embarazo y, posteriormente, durante la lactancia, los pechos cambian de forma y tamaño. Un buen sujetador es una parte esencial del armario de toda madre lactante. ¿Qué tipo de sujetadores se deben usar durante este tiempo para que no sean perjudiciales y sean cómodos de llevar?

M.K. – Los pechos durante la lactancia están cargados de leche materna, son muy bonitos y firmes. Es necesario cuidarlos especialmente durante este tiempo. Las mujeres con pechos grandes deben dormir con sujetador, mientras que las señoras con pechos más pequeños pueden hacerlo si lo desean. Sin embargo, debes recordar que debes dormir con un sujetador sin aros, que pueden comprimir los pechos. Por el contrario, durante el día, deberías llevar un aro elástico (sobre todo con los pechos más grandes), ya que esto aumenta la firmeza de tus pechos y los mantiene a un nivel adecuado.

– Me gustaría mencionar también otro tema muy importante, el del cáncer de mama. La consecuencia del tratamiento es muy a menudo la extirpación de la mama. ¿Hay sujetadores a la venta para mujeres que se han sometido a una mastectomía? ¿Pueden las mujeres con este problema seguir eligiendo el sujetador adecuado para sentirse cómodas y femeninas?

M.K. – Por supuesto. La división en categorías es la misma que en los sujetadores normales. En cada uno de ellos hay un bolsillo en el interior de un lado y del otro (para que sea posible insertar una prótesis a la izquierda o a la derecha). También hay una división en sujetadores para las mujeres a las que se les ha extirpado el pecho sólo parcialmente (sin ganglios linfáticos) y para las que se les ha extirpado el pecho con ganglios linfáticos. Según esta clasificación, se elige el producto adecuado para que cada mujer quede satisfecha y se sienta cómoda.

– Para resumir nuestra conversación, ¿qué le gustaría decir a las mujeres?

M.K. – Señoras, cuiden sus senos todos los días y recuerden la prevención. Mientras se baña, utilice movimientos circulares para comprobar si hay grumos o espesores. Haz ejercicio para mantener tus pechos firmes. Las cremas no son suficientes. Encuentra la belleza en ti misma y acéptate tal y como eres. Fomenta esta aceptación, porque cada una de vosotras es única.

– Muchas gracias por la entrevista.

LAS TALLAS NO TERMINAN CON LA «D».

Los fabricantes polacos ofrecen tamaños de copa desde la «A» hasta la «O». Los tamaños de los contornos comienzan a partir de 60 cm y llegan hasta 135 cm.

EJERCICIOS PARA TONIFICAR EL PECHO

Ejercicio de estiramiento con un expansor (muelle de ejercicio): estira los brazos hacia delante, sujeta el expansor con las manos y estíralo hacia los lados con ambas manos.

Ponte de pie y extiende los brazos delante de ti. Agítalos alternando (uno hacia arriba y otro hacia abajo).

Junta los brazos a la altura del pecho y presiona la palma de la mano contra la otra. Puedes hacer este ejercicio mientras lees un libro o ves la televisión, por ejemplo.

Realiza 15 minutos de ejercicio físico al día.